China presentará pronto un plan de acción para reducir aún más la huella de carbono de la industria del acero en el país, dijo el miércoles una importante asociación de la industria.

Según la Asociación China del Hierro y el Acero, la medida se produjo después de que el país prometiera alcanzar un máximo de sus emisiones de carbono para 2030 y lograr la neutralidad de carbono antes de 2060, como parte de los amplios esfuerzos de protección ambiental que prevén reducciones de carbono en industrias como el cemento.

Qu Xiuli, subdirector del CISA, dijo que China acelerará la aplicación de energía no fósil en la industria del acero, especialmente el uso de hidrógeno como combustible, mientras optimiza continuamente la estructura de la materia prima y la combinación de energía. Se realizarán más mejoras en las tecnologías y procedimientos de producción de acero para aliviar los cuellos de botella en la reducción de las emisiones de carbono.

El país también alentará a las empresas siderúrgicas a adoptar el desarrollo ecológico a lo largo del ciclo de vida del producto, al tiempo que promoverá enérgicamente el diseño de productos de acero ecológico entre las acerías, así como el uso de productos reciclables, de alta resistencia y de larga duración en el sector downstream.

Además, con un enfoque en los edificios públicos en las grandes ciudades, el país también acelerará la promoción de tecnologías de construcción de estructuras de acero para crear conciencia sobre el consumo de acero verde.

"El acero es uno de los sectores clave para reducir las emisiones de carbono este año", dijo Qu.

"Es urgente y de vital importancia para la industria reducir aún más el consumo de energía y recursos y hacer más avances en el desarrollo bajo en carbono".

Los datos de la asociación mostraron que la industria había logrado otra ronda de mejoras con respecto al uso eficiente de la energía y los recursos el año pasado.

La energía promedio consumida por cada tonelada métrica de acero producida por las empresas siderúrgicas clave fue equivalente a 545,27 kilogramos de carbón estándar el año pasado, un 1,18 por ciento menos sobre una base anual.

La ingesta de agua por cada tonelada de acero producida cayó un 4,34 por ciento anual, mientras que las emisiones de dióxido de azufre disminuyeron un 14,38 por ciento. La tasa de utilización de escorias de acero y gas de coque aumentó anualmente, aunque ligeramente.

Qu dijo que China también fortalecerá los esfuerzos para las reformas estructurales del lado de la oferta, incluyendo obedecer estrictamente las reglas de "intercambio de capacidad", o prohibir la adición de cualquier nueva capacidad a menos que se elimine un mayor volumen de capacidad anterior, para asegurar un crecimiento cero de la capacidad ilegal.

Dijo que el país fomentará las fusiones y adquisiciones lideradas por las grandes empresas siderúrgicas para formar nuevos gigantes siderúrgicos que tengan influencia en los mercados regionales.

La asociación también estimó que la demanda de acero de China aumentará ligeramente este año, debido a las políticas macroeconómicas estables moldeadas por el control efectivo del país de la pandemia de COVID-19 y el repunte constante del crecimiento económico.

En 2020, China produjo más de 1.050 millones de toneladas de acero bruto, un aumento del 5,2 por ciento interanual, según la Oficina Nacional de Estadísticas. El consumo real de acero aumentó un 7 por ciento en 2020 con respecto al año anterior, según mostraron los datos del CISA.